- Back to Home »
- El Lechero y la Laguna
Posted by : Unknown
martes, 28 de enero de 2014
Leyendas del Ecuador
El Lechero y la Laguna
A ella le gustaba soñar que era una pájara, a él le gustaba correr como los vientos. Los dos jóvenes nacieron en el mismo valle, pero no se conocían; eran de comunidades diferentes y peor aun, de comunidades enemigas.
Un día la casualidad quiso los
dos jóvenes se encontraran en el cruce de dos caminos.
-Que linda, ¿de donde será esta
chica?
-Que vergüenza, ya me puse
colorada.
-Hay, que bonita…
-Y me sigue mirando, este
guambra.
Desde ese día, prendados el uno
del otro, acudían diariamente a la cita en ese lugar para decirse los mejores
piropos y hablar del amor que les fue creciendo a los dos, olvidándose que
venían de comunidades diferentes. Cada encuentro era especial, nunca se
aburrían; parecía que ambos se conocían de toda la vida y cuando salían a
caminar no faltaban curiquinques volando a su alrededor.
Hasta que un día se dejaron ver
por gente de lengua suelta y el chisme se regó como serpiente venenosa:
- - Si se entero comadrita? El Luis desque se anda juntando con la guambra esa.
- - Que horror, las cosas que se ven en estos tiempos.
- - Si comadrita, ahora si se fregaron estos guambras.
Y claro los chismes llegaron a
oídos de los padres y familiares y había que impedir esas relaciones, y había
que defender el honor y la tradición, y había que castigar a los culpables que
se habían atrevido a pasar por alto el rencor y la enemistad:
- - ¿Y con quien desque andas vos? ¿No sabes que es hija de nuestros enemigos?
- - Pero mamá, yo estoy enamorado de ella.
- - Carajo, ese amor te lo voy a quitar con una buena ortigada, te voy a enseñar a respetar el honor de la familia.
ella llego a su casa se
encontró con sus padres:
- Guambra carajo, ya me entere de que andas con un hijo de nuestros enemigos.
- -Él no es mi enemigo mamá, sino el hombre que yo amo.
- -¡Nada de amores con esa gente, desde ahora no sales de la casa, has perdido mi confianza!
Se habían jurado amor y fidelidad
para toda la vida, se habían prometido permanecer juntos, pase lo que pase, y
los dos estaban dispuestos a vencer todos los obstáculos que se pusieran en su
camino.
-¿María
eres vos?
-Si, si,
soy yo, llévame muy lejos de aquí.
-Shh,
vamos calladito que nadie se dé cuenta.
Por la loma de Pucará, subían los
dos enamorados, a paso ligero, casi corriendo, tomados de la mano, y huyendo de
sus familiares, que habían empezado a perseguirlos. Hasta que las dos familias
les dieron el alcance, los rodearon, y cuando estaban a punto de atraparlos,
sucedió algo inesperado.
Una niebla envolvió a los dos enamorados,
como una coraza protectora, y una voz amable, venida de lo profundo de los
tiempos, les habló:
-Yo soy el Yachak de la montaña,
amigo del viento, del agua y del fuego, conozco la historia de ustedes, se de
la sinceridad y el amor, y he venido a ayudarlos a cumplir su promesa, a vivir
por siempre, juntos el uno y el otro.
La pareja de jóvenes, desapareció
misteriosamente del lugar, delante de sus perseguidores, sin dejar rastro
alguno, el Yachak los había protegido con un hechizo, hizo de ella una hermosa
laguna, que ahora se riega por el valle, y de él, un majestuoso lechero, que
desde la cima de la loma domina el paisaje, y declara su amor a la laguna.